jueves, 26 de enero de 2017

EL PACIENTE EXPERTO EN SALUD MENTAL


El paciente experto es una persona  que padece una enfermedad mental que  puede ayudar a otras personas que también sufren una enfermedad mental guiándolas por la red sanitaria según sus necesidades. Dando  soporte  a los pacientes con talleres o pequeñas conferencias  de los temas  que más les interesen o preocupen; como por ejemplo la recuperación, la toma de medicamentos, la importancia de cuidar una alimentación sana y equilibrada, dejar el consumo de alcohol, etc.
En los talleres el paciente experto  tiene, entre otras muchas funciones, que hablarles de la necesidad de ser claro y totalmente sincero con el psiquiatra como con el psicólogo para que la recuperación no sea tan lenta.
La integración del paciente experto como  un nuevo agente de salud puede favorecer el empoderamiento y los procesos de recuperación en la salud mental. El paciente experto puede colaborar como agente dentro de las instituciones sanitarias en los procesos de recuperación de salud mental.
Las instituciones sanitarias tienen que ocuparse  de relacionar familias, profesionales, usuarios y pacientes expertos. En las reuniones donde se relacionan  todos los implicados el paciente experto puede aportar su experiencia y ayudar a usuarios y familias para que puedan superar obstáculos que la enfermedad mental crea. El paciente experto tiene que ser un puente entre las personas afectadas y los profesionales. Y también ayudar a la integración social.
Como hemos dicho anteriormente, los pacientes expertos pueden transmitir las claves de sus experiencias, de tal manera que estas sirvan de guía al usuario en su mejora e integración. Esta información la pueden aportar otros pacientes pero son ellos, los expertos,  que tendrían preferencia a la hora de transmitir una información que proviene de su conocimiento directo y por la empatía que pueden tener por haber pasado por sus mismas experiencias. También puede ser de ayuda, como soporte moral; por ejemplo, si alguien se ha quedado  sin amigos debido a un brote, darle apoyo moral y compañía.
Su experiencia  y su acompañamiento como un apoyo emocional también forma parte de su labor. Por poner un ejemplo, había un usuario que estaba muy preocupado porque le costaba relacionarse con sus nietos pequeños. Se sentía mal porque no sabía qué decirles. La aportación de un experto en salud mental sería explicarle  que no era necesario  hablar con ellos, que sólo con su presencia ya hacía mucho. La experiencia  del paciente experto  le sirvió para tranquilizarlo.
El paciente experto tiene que infundir esperanza a la persona con enfermedad mental y que notar que les entienden porque el paciente experto ha pasado por una situación igual o parecida. Hacer compañía a la persona con enfermedad mental aunque  a veces sea sólo presencial, sin lenguaje verbal y también saber retirarse a tiempo. Otra de sus responsabilidades es darles ánimo y decirles  siempre la verdad,  sin falsas esperanzas de fecha para el alta, y  hacerles comprender que esto lo deben preguntar al médico.
Taller de periodismo del CRIS


No hay comentarios:

Publicar un comentario